La decoración en las bodas de plata debe ser muy especial. Llegar a este año de casados implica haber convivido con nuestra pareja durante 25 años, prácticamente media vida. Después de este periodo debemos realizar una gran celebración, donde no pueden faltar todos nuestros familiares y amigos. Por eso, cada detalle es importante, así como el lugar donde va a ser el evento.
¿Qué son las bodas de plata?
Las bodas de plata son una celebración muy especial que conmemora 25 años de matrimonio. Para muchas personas, este periodo de tiempo significa haber pasado media vida con el amor de su vida, además de muchas vivencias, en donde puede haber aumentado la familia y en el que existe una experiencia enriquecedora para la pareja.
Una vez que se llega a esta fecha parece que el tiempo ha pasado muy deprisa y se comienza a mirar hacia esas bodas de oro, veinticinco años después. Lo importante es que no podemos dejar que pase desapercibido este aniversario número 25. Su celebración debe ser muy especial, rodeados de todos los seres queridos, especialmente si se tienen hijos y, en algunos casos, hasta nietos.
Como todo debe ser perfecto, hay que hacer hincapié en cada detalle, comenzando por el lugar donde celebraremos el evento. La mayoría de los agraciados optan por realizar un banquete que, incluso, supere al que ya planearon en su boda. Hay quienes eligen repetir la ceremonia, de manera simbólica, para revivir esos nervios del primer momento.
¿Cómo organizar las bodas de plata?
Debemos comenzar por analizar cómo organizar una boda. Seguramente nos venga a la mente la ceremonia y todas esas sensaciones que sentíamos esa primera vez. Sinceramente, 25 años después, a pesar de que somos más maduros, podemos sentir nervios, aunque ya cambian muchas cosas.
Muchos matrimonios, hace 25 años, no habían convivido y mantenían la incertidumbre de cómo sería todo después de ese día tan especial. Ahora nuestra perspectiva es distinta y, por ejemplo, esa inquietud ya no la tendremos. En esta ocasión, nuestros nervios se pueden centrar en hacer del día del evento algo muy grande, espectacular.
Posiblemente, tenemos alguna idea de cómo son las bodas actuales, en donde siguen contratándose a bandas de música o, en su caso, a un Dj. También tenemos las mesas de dulces o saladas, así como opciones de menú muy interesantes, desde un bufet a la tradicional comida, servida en las mesas.
Quizás decidamos esta vez renunciar al pastel nupcial para dejar el paso a diferentes postres, que pueden ser desde helados hasta un surtido de pastelitos. Por supuesto que no podemos dejar de pensar en los más pequeños y ese lugar exclusivo para ellos, en donde pueden disfrutar de diferentes juegos e, incluso, espectáculos de magia o animación, también aptos para los mayores.
Al final, estos aspectos son tan personales que podemos encontrar una multitud de celebraciones de las bodas de plata. Sencillamente, debemos analizar qué nos apetece y cómo nos gustaría que transcurriera ese día tan importante. Nuestro capricho es lo que cuenta.
¿Cómo podemos decorar el lugar de la celebración?
Podemos encontrar muchas ideas de bodas espectaculares en revistas y páginas web, si realmente buscamos algo de tal envergadura. Pero, si queremos que nuestros invitados queden emocionados y hablen de lo bien que se lo pasaron en nuestro evento, no debemos dejar de fijarnos en el mínimo detalle.
Desde las sillas, hasta la temática, pasando por los centros de mesa y, por supuesto, la música de fondo, nada podemos olvidar. También hay que tener en cuenta la iluminación, especialmente si estamos en un salón. Aunque la opción de celebrar en acompañamiento con la naturaleza puede hacer del momento algo muy especial.
Es imprescindible que tengamos muy clara la fecha del evento, aunque sería genial que coincidiera con la de nuestro aniversario. Pero, si queremos que no falte nadie, es preferible seleccionar un fin de semana, sobre todo para que, los que estén más lejos, puedan llegar a tiempo.
El photocall es necesario para capturar el momento
Instalar un photocall en la entrada del lugar donde se va a realizar el evento resulta todo un éxito. Como si fuéramos estrellas de cine, podemos hacer esas fotos que perdurarán por siempre. Este día es tan importante que merece ser inmortalizado.
Podemos dejarlo fijo durante todo el evento, incluso cercano al lugar del banquete, para que, durante toda la jornada, cualquiera que pueda acercarse a él, se realice tantas fotos como quiera. Después nos será más fácil crear un álbum en una red social, en donde todos muestren su recuerdo a través de fotografías y buenas palabras.
Sillas y mesas con motivo de las bodas de plata
Siempre es sencillo recurrir al glamour en este día, si optamos por el color plata metálico, que podemos incluir, como pequeños detalles en forma de lazos, en las sillas. Las mesas también pueden lucir esta tonalidad en sus centros, contrarrestando con unas lindas flores, como claveles o rosas rojas.
Si buscamos más elegancia, están los candelabros plateados, así como una cubertería que cumpla nuestras expectativas. Los mismos detalles podemos añadir a las mesas de dulce, en caso de que optemos por ellas.
La iluminación
En caso de que este aspecto no resulte complicado, si realizamos el evento durante la época de calor, al aire libre, no tendremos que preocuparnos de nada. Es más fácil optar por iluminar después de la comida o la cena, si hemos contratado alguna actuación o invitamos a los asistentes a la barra libre. La luz debe invitar a un clima tranquilo y, aprovechando que son bodas de plata, el azul puede ser una excelente elección.
Al final, lo más importante a la hora de llevar a cabo la celebración es saber elegir entre los distintos restaurantes para bodas. Sin duda, El Olivar nos ofrece unas instalaciones adecuadas para cumplir a la perfección con nuestras expectativas. Es un magnífico complejo para celebrar unas bodas de plata, además de contar con la mejor decoración y un equipo de auténticos profesionales.
Todos los detalles son importantes, así como la decoración en las bodas de plata. 25 años de casados no se celebran todos los días, por eso no podemos dejar de supervisar cada detalle. Es un buen momento para darnos un capricho e, incluso, contraer nuevamente nupcias.
